La poca experiencia sobre estas viviendas en nuestro país hace que temas como los permisos y licencias necesarios para su instalación así como su financiación no se encuentren contemplados por la ley.
Las casas prefabricadas se han convertido en una alternativa real al ladrillo y el hormigón, en los últimos años, por su rapidez de instalación y su precio. Sin embargo, hay que ser cauteloso para no llevarse sorpresas.
Hay que tener en cuenta su Precio: Su coste aproximado es de 750 euros por metro cuadrado, precio al que hay que sumar el de la parcela donde se vaya a establecer. El Terreno: Además de sus cualidades paisajísticas, es fundamental elegir un buen suelo para asentar la vivienda. No conviene instalarlas sobre terrenos húmedos. Los Permisos: Existe un vacío legal en este punto. El ayuntamiento decidirá, según el caso, si concede una licencia de obra o de instalación. En todo caso, será necesaria una licencia de obra menor, ya que la superficie de la futura casa se debe cubrir con una placa de hormigón. Los Materiales: Pladur, celulosa, derivados del plástico… Tan importante como saber situarla es elegir unos buenos materiales que se adapten al clima del lugar.
Atención con la financiación
Las propias características de las viviendas prefabricadas –pueden ser desmontadas y trasladadas- hacen que sean consideradas por las entidades bancarias como bienes muebles, por lo que no pueden financiarse con un préstamo hipotecario. Un factor a valorar antes de decidirse a comprar.
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